POR: REDACCIÓN
El reciente triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos ha puesto en jaque al príncipe Harry y Meghan Markle, quienes podrían enfrentar la deportación si se revelan irregularidades en los documentos de inmigración del duque de Sussex.
Durante su campaña, Trump aseguró que investigaría la solicitud de visa de Harry, especialmente después de las confesiones del príncipe sobre consumo de drogas en su libro Spare. Según el magnate, cualquier irregularidad podría resultar en la expulsión del hijo del rey Carlos III del país.
Nile Gardiner, del Centro Margaret Thatcher para la Libertad, destacó que la nueva administración republicana podría hacer públicos los registros migratorios de Harry, enviando un mensaje de aplicación estricta de la ley.
Además, Trump criticó la participación de la pareja en la política estadounidense, particularmente por su postura durante las elecciones de 2020. “No soy fan de Meghan”, declaró en su momento, señalando que Harry necesitaría “suerte” en su matrimonio.
La relación entre Trump y la pareja real ha sido tensa, y este escenario plantea un nuevo capítulo en su conflicto, con implicaciones potencialmente graves para el futuro de los duques en Estados Unidos.