POR: REDACCIÓN
La importancia de los oficios tradicionales está en aumento en Estados Unidos, donde la demanda por profesionales como jardineros, pintores y especialmente carpinteros se hace cada vez más evidente en una sociedad que se profesionaliza.
Los carpinteros son expertos en la construcción, reparación e instalación de marcos y estructuras utilizando madera y otros materiales. Sus responsabilidades incluyen seguir planos de construcción, instalar elementos como ventanas y molduras, medir y cortar materiales, construir paredes y marcos de puertas, y realizar inspecciones para reemplazar estructuras dañadas. Además, tienen la tarea de dirigir a otros trabajadores en el sitio.
Equipados con una variedad de herramientas manuales y eléctricas, los carpinteros dan forma a los materiales y aseguran su trabajo utilizando clavos, tornillos y adhesivos. Según su especialización, pueden involucrarse en la construcción de edificios, la instalación de paneles de yeso, la creación de encofrados de hormigón o la colocación de pisos de madera. Su papel es fundamental para la construcción y mantenimiento de estructuras, utilizando habilidades técnicas y herramientas especializadas para llevar a cabo diversas tareas.
En términos de compensación, la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos indica que un carpintero promedio gana aproximadamente $27.09 dólares por hora, lo que se traduce en un salario anual de alrededor de $56,350 dólares. Sin embargo, las cifras varían según el sector: en la construcción de edificios no residenciales, el salario promedio anual es de $61,830; para contratistas de acabado de edificios, es de $57,350; y en la construcción de edificios residenciales, $54,880. Los aprendices suelen comenzar con un salario menor, pero a medida que adquieren experiencia, sus ingresos aumentan.
Se proyecta que el empleo en el campo de la carpintería crecerá un 4% hacia 2033, un ritmo que se alinea con el promedio de otras profesiones. Se estima que anualmente se crearán aproximadamente 76,500 nuevas vacantes para carpinteros, muchas de las cuales surgirán debido a jubilaciones o cambios de ocupación. Una ventaja considerable es que no se requieren títulos universitarios para ejercer como carpintero; en muchos casos, solo se solicita un certificado de secundaria.