POR: REDACCIÓN
La vida de Luis Miguel, uno de los artistas más icónicos de la música latina, ha estado marcada por momentos de gran felicidad y dolor profundo. Uno de los capítulos más tristes de su vida es la desaparición de su madre, Marcela Basteri, un enigma que ha mantenido la atención del público durante años.
Recientemente, su hermano Alejandro Basteri ha decidido abordar este tema tan delicado. En respuesta a las recientes afirmaciones de Mariana Ochoa, exnovia de Alejandro, quien en una entrevista con Yordi Rosado sugirió que Marcela podría estar en un convento, Alejandro hizo aclaraciones en sus redes sociales. Según Ochoa, un convento en Italia se había puesto en contacto con Alejandro, asegurando que Marcela había intentado comunicarse con él. Esto alimentó la esperanza de que su madre pudiera estar viva, aunque nunca se concretó.
Alejandro enfatizó en su mensaje que este asunto es extremadamente sensible para la familia: “Para aquellos que tienen dudas sobre el paradero de mi madre, les pido que dejen de molestar. Ella nunca habló español correctamente; su lengua materna era el italiano. No se puede seguir perturbando la memoria de alguien tan importante para nosotros”.
Su declaración refleja no solo un intento de proteger la memoria de Marcela, sino también el profundo dolor que persiste en la familia. Luis Miguel ha compartido previamente su lucha con este tema, señalando: “Mi mamá es una de las cosas que me duelen y es uno de los temas que siguen estando pendientes. Es algo que no he podido superar, es muy difícil”.
Marcela Basteri, nacida el 28 de noviembre de 1946 en Italia, se casó con Luisito Rey y tuvo tres hijos: Luis Miguel, Alejandro y Sergio. Su carrera como actriz y modelo fue eclipsada por su misteriosa desaparición, dejando a sus hijos bajo el cuidado estricto de su padre. En ese momento, Luis Miguel tenía apenas 17 años y Alejandro 14, marcando un período de gran vulnerabilidad en sus vidas. La búsqueda de respuestas sobre el paradero de Marcela continúa siendo un tema que afecta profundamente a la familia.