POR REDACCIÓN
Con el respaldo de más del 80 por ciento de la militancia panista, Jorge Romero fue elegido como nuevo líder del Partido Acción Nacional (PAN) en un proceso interno que marcó un hito en la historia reciente del partido. Tras obtener el 80.6 por ciento de los votos, frente al 19.4 por ciento de su única oponente, Adriana Dávila, Romero se comprometió a revitalizar la fuerza política de su partido y aseguró que la lucha del PAN continuará sin descanso, más allá de cualquier desafío.
En su primer mensaje como dirigente nacional, Romero hizo hincapié en que su partido no está derrotado, como algunos podrían suponer por los recientes resultados electorales. “El PAN solo está derrotado cuando deja de luchar, y nosotros jamás dejaremos de luchar por México, por sus ciudadanos y por el futuro de este gran país”, afirmó con firmeza ante los militantes.
Asimismo, el nuevo líder del PAN señaló que su misión es transformar a su partido en una verdadera alternativa de gobierno, sin permitir que factores externos a la militancia influyan en sus decisiones internas. “Asumimos este reto con total responsabilidad. El futuro del PAN estará en manos de sus militantes, no de actores externos”, aseguró, en un claro mensaje de independencia y determinación.
Romero llega a la dirigencia en un momento clave para el PAN, que busca recobrar su fuerza y posicionarse como una opción viable para las elecciones presidenciales de 2024. Con este renovado liderazgo, el partido planea fortalecer su presencia y cohesionar a sus miembros, a fin de ofrecer una propuesta sólida frente al electorado mexicano.
La victoria de Romero refleja un fuerte apoyo interno y da muestra de un partido dispuesto a reinventarse y seguir luchando por sus ideales.
