POR: REDACCIÓN
El martes, Irán lanzó una serie de misiles balísticos hacia Israel como respuesta a la ofensiva israelí contra sus aliados, Hezbolá, en Líbano. Este ataque ha sido calificado por Estados Unidos como una escalada significativa en las tensiones entre ambas naciones.
Jake Sullivan, asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, afirmó que las fuerzas militares estadounidenses en la región jugaron un papel crucial en frustrar el ataque. Sullivan declaró que el Gobierno de Biden está en consulta con Israel para determinar la respuesta adecuada ante esta provocación.
“Este ataque representa un acontecimiento significativo por parte de Irán. Hemos dejado claro que habrá graves consecuencias”, advirtió Sullivan durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca. Aunque no especificó cuáles serían estas consecuencias, enfatizó que se mantendrá una vigilancia constante sobre la situación.
Este ataque de Irán ocurre en un contexto de creciente tensión en la región, a pesar de los esfuerzos del Gobierno de Biden por alcanzar un alto el fuego en el conflicto de Gaza. La situación sigue siendo crítica y el futuro de las relaciones entre Estados Unidos, Israel e Irán está en juego.
